Las gastroenteritis parasitarias afectan principalmente a los gatitos jóvenes, especialmente a aquellos que provienen de criaderos o de albergues, aunque también pueden afectar a gatos adultos. Podemos distinguir 2 grupos principales: los helmintos o gusanos intestinales, y los protozoos. Son enfermedades contagiosas que en algunos casos pueden ser graves y llevar a la muerte del animal si no se tratan a tiempo y adecuadamente. En ocasiones, un mismo animal esté infestado por distintos parásitos, lo que complica el tratamiento y empeora el pronóstico.